Para está boda, al lado del lago se montó la jaima en un entorno en el que quedaba totalmente integrada con el paisaje, alfombras de coco para que se viera mas campestre..
Centros altos encima de las mesas con flores de color rosa, sillas de madera que le daban un toque campestre y el vaso de color rosa a juego con las flores. Manteles de lino en beige muy neutros ya que el toque de color se le daba con las flores.
La iluminación con bombillas colgantes que le daban un toque mágico.
Fotografía: Black & Blanc