En la zona de Lleida, una boda en plena naturaleza con una carpa montada entre campos de trigo.
El espacio donde colocamos las carpas, no se veía ninguna casa alrededor, todo eran campos y bosques. Por lo que las carpas de color marrón quedaban muy integradas en el entorno.
Como podéis ver en la foto, los cerramientos transparentes van cogidos a los pilares de la carpa de forma decorativa y solo se utilizarán en el caso de necesidad para cerrar la carpa, por lluvia, viento o frío. Siempre aconsejamos que se pongan aunque no se utilicen. Tuvieron mucha suerte los novios porque les hizo un día espectacular.
El color marrón de la carpa encajaba perfectamente con el colorido de la naturaleza.
Dentro de la carpa las mesas tenían diferentes formas, rectangulares, cuadradas o redondas y con dos tipos diferentes de manteles, para no dar sensación que todo es igual, queda bien combinar.
La zona chill-out con balas de paja.
Debajo de la carpa, desde la mesa sentado es la perspectiva que tiene el invitado del paisaje.
Para el aperitivo, un toque muy refrescante, los invitados pudieron probar diferentes sabores de aguas. El catering Le Chef